Paris, Francia.- El proyecto se llevará a cabo a nivel mundial y se centrará en cuatro regiones: África, los Estados Árabes, América Latina y el Caribe y Europa del Este y al menos diez países objetivo.
Mediante esta iniciativa, Estados Unidos apoya la labor de la UNESCO en materia de promoción de la seguridad de los periodistas y la libertad de expresión, fortaleciendo así las instituciones democráticas en países específicos.
Se prestará especial atención a los países afectados por crisis para fortalecer los marcos normativos y las iniciativas programáticas basadas en la prevención, la protección y el enjuiciamiento de los delitos contra periodistas, de conformidad con el Plan de Acción de las Naciones Unidas sobre la Seguridad de los Periodistas y la Cuestión de la Impunidad . Esto se hará involucrando a las principales partes interesadas (periodistas, agentes del orden, jueces y otros actores judiciales) para promover la libertad de expresión de conformidad con las normas internacionales.
Apoyo a la integridad electoral
Otro ámbito de interés son las elecciones, en las que la UNESCO intensificará su labor en materia de libertad de expresión con los principales interesados electorales, incluidos los órganos de gestión electoral, las autoridades nacionales, los observadores electorales, las organizaciones de la sociedad civil, los medios de comunicación y los periodistas, para elaborar y aplicar políticas que promuevan la libertad de expresión, el acceso a la información y la seguridad de los periodistas, contribuyendo así a la integridad electoral y a los procesos democráticos pacíficos.
En tercer lugar, el proyecto pretende abordar las amenazas digitales y los ataques legales contra periodistas y trabajadores de los medios de comunicación en al menos 10 países, mediante la creación de capacidades, el fortalecimiento de redes y el intercambio de conocimientos entre partes interesadas, como periodistas, abogados, jueces y organizaciones de la sociedad civil.
Un cuarto ámbito de atención será el fortalecimiento de políticas inclusivas y con perspectiva de género en las salas de redacción, así como la prestación de apoyo psicosocial a las mujeres periodistas, para fomentar la seguridad y la resiliencia de las mujeres periodistas frente a amenazas y ataques específicos de género en línea y fuera de línea.
El papel fundamental de los periodistas
El acuerdo del proyecto se basa en la premisa de que los periodistas y los trabajadores de los medios de comunicación desempeñan un papel fundamental en la sociedad, ya que sustentan el debate democrático al brindar a la población acceso a información confiable, verificación de hechos, análisis y comentarios. Mediante sus esfuerzos por investigar y arrojar luz sobre las irregularidades, son actores cruciales para apoyar la justicia y la rendición de cuentas.
Al mismo tiempo, los periodistas se enfrentan a un empeoramiento de las condiciones en todo el mundo: ataques por parte de actores violentos y un mayor uso del acoso legal, una menor confianza pública en el periodismo profesional, violencia en línea, especialmente dirigida contra las mujeres periodistas, en un contexto de alteración generalizada de los modelos de negocio de los medios de comunicación en la era digital. A todo esto se suma un número cada vez mayor de periodistas exiliados y un número cada vez mayor de periodistas asesinados, algo que el proyecto pretende abordar.
El proyecto tendrá un alcance global, con un enfoque específico en los países del Sur Global y particularmente en África que trabajan en regiones que se acercan a elecciones y experimentan crisis, con actividades propuestas a nivel global, regional y nacional.
La UNESCO es el coordinador del Plan de Acción de las Naciones Unidas sobre la Seguridad de los Periodistas y la Cuestión de la Impunidad y el proyecto tiene como objetivo dar seguimiento a muchas de las prioridades identificadas durante las consultas temáticas y regionales del décimo aniversario, así como dar seguimiento al Proyecto Chilling sobre la seguridad de las mujeres periodistas y mejorar y fortalecer la Iniciativa de Jueces de la UNESCO , que ha capacitado a más de 36.000 actores judiciales y 12.000 agentes del orden en todo el mundo durante la última década.
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