Amigos del detenido consideran que es un joven trabajador y la voz de las denuncias ciudadanas en una radio comunitaria de Nejapa. Días antes de su detención, Élmer Romero había denunciado la captura arbitraria de su hermana.
El Salvador.- La Policía Nacional Civil (PNC) capturó a Élmer Vladimir Romero Martínez el jueves 19 de mayo. Élmer es un joven de 30 años, periodista de Radio Juventud 92.1FM, una radio comunitaria agremiada a la Asociación de Radiodifusión Participativa de El Salvador (ARPAS). Amparados en el régimen de excepción, policías llegaron hasta un local en el que su familia vende alimentos y lo detuvo, acusándolo de agrupaciones ilícitas.
Su detención ocurrió cerca de las 2:00 de la tarde, frente a su familia, en el puesto de comida y golosinas que es propiedad de su mamá, ubicado en la comunidad Nuevo Ferrocarril, en el municipio de Nejapa, departamento de San Salvador.
Familiares y conocidos de Élmer denuncian que su detención es arbitraria, ya que consideran que él «no andaba metido en malos pasos». Al contrario, mencionan que siempre ha sido un joven líder de la comunidad y además es un activista político de la zona.
Mencionaron que su único delito fue publicar en sus redes sociales expresiones en contra del gobierno y ser la voz de la comunidad de Nejapa. «Yo lo conozco desde hace tiempo, trabajador, tranquilo, es líder comunal, miembro de la ADESCO. Además trabajó en la Alcaldía de Nejapa en el periodo anterior y fue despedido hace mes y medio por la nueva administración», dijo un compañero de Élmer, quien prefirió mantener su nombre en el anonimato por temor a represalias de la Policía.
En los días previos a su detención, Élmer estaba concentrado en buscar apoyo para sacar a su hermana de prisión, capturada con similares cargos hace 20 días.
«Él un fin de semana atrás me estuvo contando que ya su hermana había cumplido 15 días detenida, y dijo que era probable que esta semana saliera, porque no tenían pruebas contra ella. Ella también fue detenida bajo el régimen de excepción, por el delito de agrupaciones ilícitas», dice el compañero de trabajo de Élmer.
Élmer ya ha sido trasladado al Penal de Izalco, según comentaron los amigos del detenido, quienes además, lamentan que la madre «se anda movilizando para sacar a sus hijos de la cárcel». Ellos lamentan los daños colaterales que está causando el régimen de excepción y temen que más personas sean detenidas sin haber cometido ningún delito. Según un informe de Cristosal, una organización no gubernamental de derechos humanos, a la fecha hay 596 denuncias por capturas arbitrarias.
La Prensa
