Los fotoperiodistas Jorge Ibáñez Parada y Juan Carlos Torrejón, fueron agredidos en la mañana del 8 de agosto por militantes del partido de gobierno cuando realizaban cobertura informativa de la primera de dos jornadas de paro de actividades convocadas por instituciones cívicas y autoridades de Santa Cruz.
La Asociación Nacional de la Prensa (ANP) que representa a los principales diarios de Bolivia, rechazó las acciones de personas que traducen el discurso de odio en violencia contra los periodistas que cubren conflictos.
La organización de medios impresos recordó que está vigente la Constitución Política del Estado (CPE) que protege el trabajo informativo y garantiza las libertades de expresión, de prensa y de opinión.
Las protestas en el departamento de Santa Cruz son protagonizadas por ciudadanos en rechazo al diferimiento del Censo Nacional de Población y Vivienda que inicialmente fue programado para noviembre de este año, y luego fue postergado por el gobierno hasta el año 2024.
Ibáñez Parada dijo a la Unidad de Monitoreo de la ANP que en el momento de sufrir la agresión se encontraba en el sexto anillo y la avenida La Guardia (zona oeste de la ciudad) donde registraba imágenes de personas afines al partido del gobierno, el Movimiento al Socialismo (MAS), que increpaban a policías por no despejar una barricada.
“Hice fotos y videos del incidente y me acerqué a la gente del MAS para entrevistarlos. Se molestaron cuando les pregunté por qué no habían salido a liberar las vías en los bloqueos de días anteriores que realizaron grupos afines al gobierno nacional. Me rodearon unas cinco personas y una de ellas me lanzó al descuido un ‘manazo’ (golpe) a la cara, que me hizo tambalear y cayó una cámara”, manifestó el periodista.
Juan Carlos Torrejón, fotoperiodista que estaba en el lugar, registró imágenes del incidente e intervino para frenar la agresión.
“Yo también recibí una patada por la espalda. Era un grupo de choque del MAS. Otros colegas que estaban en el lugar nos ayudaron, porque la Policía no intervino”, lamentó Torrejón.
El Censo Nacional debía realizarse el próximo 16 de noviembre, pero fue diferido dos años, lo que ha motivado reclamos en varias regiones de Bolivia porque la consulta es considerada fundamental para la redistribución de fondos públicos para la salud y educación, además de la reasignación de escaños en el Parlamento de acuerdo a un nuevo mapeo de la población.
El Diario