Irán redobló la presión sobre celebridades y periodistas el jueves (29.09.2022) en medio de la ola de protestas organizadas por la muerte de la joven Mahsa Amini tras haber sido detenida por la policía de la moral.
«Tomaremos acciones contra los famosos que soplaron las brasas» de los «disturbios», dijo el gobernador provincial de Teherán, Mohsen Mansouri, citado por la agencia de noticias ISNA.
Hace unos días, el jefe de la justicia iraní, Gholamhossein Mohseni Ejei, también lanzó un aviso similar contra aquellos que «se han hecho famosos gracias al apoyo de nuestro sistema […] [y] se han unido al enemigo».
Las advertencias llegaron casi dos semanas después de que se desatara una ola de protestas en Irán, duramente reprimida, a raíz del deceso de Mahsa Amini. Cineastas, deportistas, músicos y actores han apoyado las manifestaciones.
Reportan más de 80 muertos
Según la agencia de noticias Fars, «unas 60» personas habrían muerto en las protestas, pero la oenegé radicada en Oslo Iran Human Rights elevó el balance a al menos 83 decesos, incluidos niños.
Amini, una kurda de 22 años, murió el 16 de septiembre, tres días después de haber sido arrestada por la policía de la moral, que vigila -entre otros- el cumplimiento del estricto código de vestimenta impuesto a las iraníes.
Periodistas arrestados
Por otro lado, las fuerzas de seguridad iraníes arrestaron el jueves a la periodista Elahe Mohammadi, que había cubierto el funeral de Amini, informó su abogada.
La policía también detuvo a la periodista Nilufar Hamedi, del diario reformista Shargh, que acudió al hospital en el que estuvo ingresada en coma Amini y que ayudó a que la prensa internacional se hiciera eco de la noticia.
El Comité para la Protección de Periodistas (CPJ) anunció por su parte el jueves que otros tres reporteros, Farshid Ghorbanpour, Aria Jaffari y Mobin Balouch, habían sido detenidos, llevando el total de periodistas arrestados a 28.
Atribuyendo las manifestaciones a fuerzas exteriores, Irán llevó a cabo el miércoles unos bombardeos que dejaron 13 muertos en la región del Kurdistán iraquí, acusando a los grupos armados opuestos al régimen radicados en esa región de atizar los disturbios.
DW