Bogotá, Colombia.- Periodistas centroamericanos alertaron en Bogotá sobre la persecución incesante en su contra en sus países y que cada vez es más difícil ejercer el oficio en naciones como Nicaragua, donde muchos reporteros han tenido que exiliarse por el acoso al que los somete el Gobierno de Daniel Ortega.
Así lo manifestaron este domingo durante el panel ‘No se calla la verdad encarcelando a periodistas’ del Festival Gabo, que estuvo moderado por el jefe de Redacción del medio salvadoreño El Faro, Óscar Martínez.
Wilfredo Miranda, cofundador del portal Divergentes, recordó en la charla que en la actualidad no existe “un periódico impreso en Nicaragua” y que el régimen de Ortega les “arrebató las calles”, pues “en los últimos meses el Gobierno ha logrado encontrar y neutralizar” a los periodistas que continúan trabajando en el país.
“Cada vez estamos haciendo menos investigaciones, menos reportajes, porque el ámbito de acción de la dictadura ha sido muy eficaz”, añadió Miranda, que cubre Nicaragua desde Costa Rica porque le tocó exiliarse.
La directora de la Red Centroamericana de Periodistas, Angélica Cárcamo, señaló que en El Salvador hay un problema y es que el segundo periodo de Gobierno de Nayib Bukele es “inconstitucional”, por lo que hay “la instalación de una dictadura aunque no lo quieran reconocer sectores internacionales”
“¿Cómo poder continuar ejerciendo el periodismo en un escenario de un Gobierno que sabemos que es inconstitucional que tiene una narrativa permanente de ataques en contra de la prensa?”, se preguntó.
En el caso de Costa Rica, el presidente de la Red Centroamericana de Periodistas, Álvaro Murillo, señaló que si bien la situación de ese país es menos grave que la de sus vecinos, “hay otros ataques a la libertad de prensa que son quizás más incipientes”.
“Tenemos otros problemas que hasta hace muy poquito no teníamos: La estigmatización, el desprestigio de la función periodística”, manifestó Murillo.
La directora editorial de Contracorriente, Jennifer Ávila, aseguró que en Honduras, bajo el Gobierno de Xiomara Castro, “hay nuevas modalidades de acoso”.
“Este Gobierno sí ha sido mucho más acosador a nivel digital, con las tropas digitales, creo que también es parte de la moda poner como enemigo público al periodismo”, expresó Ávila.
Elevar la voz por José Rubén Zamora
Durante el panel, los participantes también elevaron la voz por la libertad del periodista guatemalteco José Rubén Zamora, fundador del matutino El Periódico que está detenido hace más de 700 días en su país, y del nicaragüense Víctor Ticay, condenado a ocho años de prisión el año pasado por varios delitos, así como por aquellos reporteros que se han tenido que exiliar.
“Estamos aquí para elevar la voz por ellos y ellas para que puedan estar en sus países volviendo ejercer el periodismo, estamos aquí para defender el derecho a la libertad de expresión y el derecho a saber de las personas”, expresó la periodista guatemalteca Marielos Monzón.
En el cierre de la charla, el hijo del periodista detenido, José Carlos Zamora, subió al escenario y pidió al presidente guatemalteco, Bernardo Arévalo, que admita, como lo hizo durante la campaña electoral, “que la detención” de su padre “es arbitraria”.
Cierre de un festival que pide libertad
La charla de los periodistas centroamericanos es una de las que cierra este domingo la edición 12 del Festival Gabo, la tercera que se realizó en Bogotá.
Más de 170 invitados participaron en unos 140 encuentros para todas las edades en torno al periodismo, el arte, la literatura, la música, el teatro, el cine y la diversidad cultural iberoamericana.
Temas como la inteligencia artificial, la transformación del periodismo, el contexto geopolítico y el legado de Gabriel García Márquez diez años después de su fallecimiento son algunas de las temáticas sobre las que giró el festival, que también contó con la participación de algunas de las figuras más relevantes del periodismo, como la argentina Leila Guerriero.
Igualmente participó el presidente de EFE, Miguel Ángel Oliver, quien reivindicó el periodismo de las agencias de noticias en contextos de polarización política.
La Prensa