Por Katherine Pennacchio
Un programa de mentorías destinado a apoyar a periodistas a producir historias sobre el cambio climático se está expandiendo en América Latina.
Tras dos exitosos ciclos en 2022, la organización Climate Tracker ha iniciado una tercera cohorte con ocho periodistas de la región.
“Decidimos no sólo repetir este programa tres veces este 2023, sino también ampliar el número de periodistas – y países – a ocho, llegando esta vez a México, Venezuela, Colombia, República Dominicana, Brasil, Argentina, Chile y Perú. Este tercer ciclo está recién comenzando, pero no me cabe duda de que tendremos grandes historias”, contó a LatAm Journalism Review (LJR) Paula Díaz Levi, periodista de ciencia y medioambiente y editora para Latinoamérica de Climate Tracker.
El Programa de Mentorías en Periodismo Climático tiene un foco especial en la cobertura de la transición energética justa.
Según explica la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, esta transición se entiende como el cambio hacia sistemas energéticos más sostenibles sin gravar a las poblaciones más vulnerables.
“La transición energética es sin duda una de las transformaciones más urgentes que necesita la humanidad para mitigar la crisis climática y adaptarse a ella”, señala un reciente informe de Climate Tracker.
La organización encontró que el tema “enfrenta una serie de dificultades, vacíos y desafíos en los medios latinoamericanos”.
Como parte de sus esfuerzos para abordar la situación, Climate Tracker reunió en 2022 a seis periodistas que publicaron sobre las petroleras que manchan el mar del Perú, la fiebre del litio en Argentina, los parques eólicos que se instalan en zonas indígenas de Colombia, y pueblos en Chile que no cuentan con energía eléctrica, entre otras.
La nueva cohorte que comenzó en mayo terminará su ciclo de mentoría en agosto.
Propuestas con “fuego”
A la hora de elegir los participantes del programa de mentorías, Climate Tracker no se fija en solo una característica sino más bien en la combinación de habilidades y en las ganas de contar historias climáticas sobre América Latina.
En las mentorías pueden participar periodistas jóvenes y emergentes, periodistas experimentados o con gran trayectoria, así como freelancers, periodistas de medios grandes o medios pequeños e independientes.
Lo importante, según explica Díaz Levi, es “siempre enviar un buen pitch que sea breve, inspirador y novedoso, y que refleje no sólo que la o el postulante se dio el tempo de entender el fin de cada proyecto, sino que también se vea el interés, esmero y ‘fuego’ en su propuesta”.
Un caso de éxito fue el de la periodista freelance chilena, Isadora Pinochet, quien participó en el programa de mentorías entre octubre de 2022 a enero de 2023. Durante ese tiempo, Pinochet trabajó en historias sobre cómo la accesibilidad energética y una transición justa son aún deudas pendientes del Estado chileno.
“Participar de la mentoría fue una experiencia de aprendizaje y desarrollo profesional super completa. La beca incluye clases y apoyo constante respecto a los temas que desarrollamos en nuestros reportajes, además de herramientas y contactos para guiar nuestro trabajo”, dijo Pinochet a LJR.
Por otra parte, el periodista venezolano y cofundador de Mediosur, Francisco Rincón, fue elegido para la cohorte de mentorías de Climate Tracker de mayo a agosto de 2023. Rincón contó a LJR que el primer proyecto que espera desarrollar durante el programa será sobre las iniciativas sociales de energía solar en comunidades Wayuu remotas de la Península Guajira venezolana.
“Me postulé al programa porque sentí que era una gran oportunidad. El programa también consideraba a Venezuela [por primera vez] y nuestras complejidades, y además permitía abordar con enfoque en la transición energética un tema con múltiples aristas y realidades que necesitamos abordar con urgencia en nuestro país, que lamentablemente está muy atrasado”, dijo Rincón.
Desafíos en tiempos de sequía y cambio climático
El periodismo ambiental y climático enfrenta obstáculos y desafíos para su desarrollo en América Latina y el Caribe. Entre estos desafíos se encuentran la falta de espacios para la publicación de historias, pocas fuentes de financiamiento, escasa transparencia en la publicación de datos públicos, así como la falta de capacitación o especialización de los mismos periodistas y editores.
“Creo que entre los principales retos están el limitado o nulo acceso a la información pública; la desactualización y/o ausencia de datos; la autocensura; la complejidad de acceder a zonas con presencia y poder de los grupos armados y militares; el acceso a fuentes especializadas; la inseguridad, y las limitaciones presupuestarias”, contó Rincón a LJR.
“Creo que otro de los principales retos que tenemos es el de formarnos para abordar las historias desde la dignidad humana con rigurosidad, diversidad, comprensión de los tecnicismos, cercanía y sensibilidad”, agregó el periodista venezolano.
Pinochet coincide con la problemática para acceder a datos de interés y la falta de portales o bases de datos abiertas para consultar.
“En Chile, la transparencia en los datos solo es regulada en organismos públicos, por lo que empresas privadas (la gran mayoría) funcionan en completo anonimato, lo que hace muy complejo saber cuántas hay, dónde, quiénes son sus dueños, cuánto emiten, etc.”, aseguró la periodista.
Los periodistas consultados también insisten en la importancia de la especialización en periodismo ambiental para poder desarrollar un ojo crítico en tiempos de sequía y cambio climático.
“Siempre digo que el periodismo ambiental y climático es un trabajo con sentido y que hoy es más necesario que nunca. Por largo tiempo no ha sido valorado ni incentivado en muchas escuelas de periodismo y medios de comunicación”, dijo Díaz Levi.
“Aun así, esto está cambiando para bien, pues cada vez hay más medios y periodistas que quieren impulsar las historias ambientales y climáticas que necesitan ser contadas, y cada vez hay más redes de apoyo para este fin”, agregó Díaz.
LatAm Journalism Review