Mogadiscio, Africa.- El periodista y director de Dawan TV, Alinur Salaad, fue detenido por la policía regional en Mogadiscio el 22 de julio acusado de informar falsamente y de insultar a las fuerzas armadas. Salaad fue llevado a los tribunales el 23 de julio y se le ordenó permanecer en prisión preventiva durante 45 días mientras se realizan las investigaciones y se preparan los posibles cargos. La Federación Internacional de Periodistas (FIP) y su afiliada, la Unión Nacional de Periodistas Somalíes (NUSOJ), condenan esta detención arbitraria como un ataque a la libertad de prensa y exigen la liberación inmediata e incondicional de Salaad.
El periodista Alinur Salaad fue detenido poco después de que un reportaje en vídeo de un minuto publicado en Dawan TV y en su cuenta personal en las redes sociales se hiciera viral, atrayendo la atención del público y de los medios de comunicación. En el vídeo, Salaad acusó a los soldados somalíes de traficar con khat, una planta narcótica suave, lo que llevó a las autoridades a acusarlo de informar falsamente e insultar a las fuerzas armadas. El periodista también ha publicado varios informes delicados sobre cuestiones de seguridad nacional.
Según sus compañeros, Salaad se encuentra detenido en la comisaría de policía de Waberi. La policía emitió un comunicado en el que detalla los cargos y anunció su inminente comparecencia ante el tribunal. La detención del periodista ha provocado una rápida condena por parte de varios periodistas y organizaciones de medios de comunicación.
El Sindicato Nacional de Periodistas Somalíes (NUSOJ) exigió la liberación inmediata e incondicional de Salaad, considerando su arresto como una medida para suprimir el escrutinio periodístico. El sindicato afirma que el arresto es un esfuerzo por motivos políticos para silenciar una voz crítica de los medios de comunicación, y lo caracteriza como un ataque a la libertad de prensa. El NUSOJ cree que la detención de Salaad es una reacción directa a sus reportajes sobre temas sensibles, como la participación de soldados somalíes en el comercio de khat y su posible complicidad política.
El secretario general de la NUSOJ, Omar Faruk Osman, dijo : “Detener a un periodista sin justificación legal suficiente ni el debido proceso por decir verdades incómodas es completamente inaceptable y lo condenamos en los términos más enérgicos posibles. Es tarea de los periodistas sacar a la luz pública cuestiones de interés público y analizarlas”.
El secretario general adjunto de la FIP, Tim Dawson, afirmó: “Las autoridades deben defender la libertad de prensa y garantizar que los periodistas puedan trabajar con seguridad. Los periodistas deben poner de relieve cuestiones de interés público y exigir cuentas a los poderes públicos. No deberían ser detenidos por sus informaciones. El periodismo no es un delito “.
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