La FEP describe en su manifiesto la situación que atraviesa la información en Europa: desinformación, empresas informativas oligárquicas, ataques a los medios de comunicación públicos y agresiones sin precedentes a periodistas, que además soportan unas condiciones laborales precarias. Todo ello, afirma, está provocando una fuga de cerebros del sector que podría tener un impacto devastador en la calidad del periodismo y el pluralismo de los medios, ya amenazados por los “desiertos” de noticias locales y los “cebo de clics” que buscan ganancias. Una situación que tampoco podrá reconducir la inteligencia artificial (IA), que tiene un gran potencial pero conlleva muchos riesgos.
La FEP recuerda que las elecciones al Parlamento Europeo de 2024 marcarán el rumbo de la UE en la próxima legislatura, y el periodismo necesita un Parlamento y una Comisión comprometidos con una Europa justa, respetuosos con los derechos sindicales y humanos, con la libertad y el pluralismo de los medios de comunicación, y que supervise la aplicación de las cruciales medidas regulatorias conseguidas en los últimos cinco años: la directiva de derechos de autor, la Ley de Servicios Digitales, la Ley de Inteligencia Artificial, la directiva anti-SLAPP y la Ley Europea de Libertad de Medios.
Tres ejes de acción
Para conseguirlo, la FEP plantea en su manifiesto tres ejes de acción:
Fomentar un periodismo viable:
Invertir masivamente: financiación pública transparente en condiciones de plena competencia, financiación filantrópica, etc.
Garantizar la independencia y la financiación sostenible de los medios de comunicación de servicio público.
Aplicar impuestos a las grandes tecnológicas: garantizar la remuneración de las plataformas por el contenido periodístico.
Asegurar una remuneración justa y los derechos de autor de los periodistas.
Asignar un presupuesto permanente de la UE a proyectos de periodismo independiente, alfabetización mediática, seguimiento de infracciones y otros tipos de asistencia.
Promover la seguridad de los periodistas:
Permitir un entorno seguro para los periodistas para protegerlos de la violencia física y on line, especialmente a mujeres y grupos marginados.
Acabar con la impunidad.
Reconocer y prevenir procedimientos legales abusivos destinados a silenciar a los periodistas.
Prever el despliegue ilegal de software espías contra periodistas.
Regular la inteligencia artificial:
Priorizar la máxima transparencia sobre los datos de formación y el contenido generado artificialmente.
Hacer cumplir la remuneración obligatoria a los autores por los contenidos generados por IA utilizando trabajos periodísticos.
Fomentar el desarrollo de directrices para el uso responsable y el desarrollo de la IA periodística.
Garantizar que la IA sea una parte integral de la formación de periodistas y trabajadores de los medios con el fin de prevenir cualquier uso indebido de la misma para crear información errónea y desinformación.
Finalmente, el manifiesto elaborado por la FEP reconoce que la UE ha hecho en los últimos cinco años más que nunca para crear un espacio más seguro y sostenible para el periodismo, pero considera que no es suficiente y advierte de que el periodismo profesional independiente, que es el mejor antídoto contra la desinformación, es caro.
La participación de la audiencia, los nuevos formatos periodísticos, el apoyo a la alfabetización mediática y el uso correcto de la IA son cruciales para hacer del periodismo una herramienta para que los ciudadanos puedan conectarse, debatir, aprender y participar en el discurso público en las sociedades polarizadas que habitan Europa hoy en día. Todo ello requiere modelos de negocio sostenibles, que garanticen condiciones de trabajo y una remuneración digas.
apm